Este pueblo tiene historia:
Cuando hablamos de Sabiñánigo, no debemos de olvidar que su origen está en este pueblo, aunque hoy se denomina Sabiñánigo Alto o San Feliciano, para la gente de aquí, la ciudad de Sabiñanigo que conocemos como tal, es: "el barrio".
A principios del siglo XX, tras la llegada del ferrocarril, comenzó a formarse un núcleo comercial entorno a la estación de Sabiñanigo, a un kilómetro de distancia del pueblo original.
Más tarde, en 1918, empezaron a establecerse las fábricas. La nueva dimensión industrial y otros factores socioeconómicos, generaron una fuerte corriente de emigración de los pequeños pueblos del Pirineo y Prepirineo. Este auge, provocó el desplazamiento del topónimo de nuestro
pueblo al barrio de la estación.
Del antiguo Sabiñanigo, se conserva parte del castillo de tendencia medieval: un torreón aprovechado como campanario de la parroquia actual. La casa del colegio fue edificada en 1605.
En 1499, en Sabiñánigo, se registraron doce fuegos con unos 48 habitantes, que vivian de la agricultura y la ganadería.